Los supermercados de la provincia de Buenos Aires ya utilizan "bolsas biodegradables" según lo establece la ley 13.868 sancionada el 15 de octubre de 2008 donde se otorgó a los súper, híper y minimercados un plazo de 12 meses para sustituir las bolsas de nylon. En tanto, los almacenes cuentan con dos años desde esa fecha para cumplir con la reglamentación.
Sólo se permitirá el uso de bolsas de polietileno por cuestiones de asepsia, para contener alimentos o insumos húmedos elaborados o preelaborados. La medida tiene como objetivo evitar el impacto ambiental que significa el enterramiento de bolsas de plástico.
Sin embargo, la investigadora de la Planta Piloto de Ingeniería Química de nuestra ciudad, Silvia Barbosa, aseguró que estas "bolsas oxodegradables no son biodegradables. Eso está probado por organismos internacionales".
"Lo que se denomina oxodegrable es un material que tiene un 98% de polietileno, el mismo que se usaba antes, y a lo sumo un 2% -generalmente es un 1%- de un catalizador que es una sustancia que divide en el tiempo en pedacitos más pequeñitos a la bolsa de polietileno. Es decir, no se va a ver una bolsa grande volando sino pedacitos, pero no hay bacterias que puedan alimentarse de este tipo de materiales porque sigue siendo polietileno"", aseguró.
Además aclaró que "el polietileno no es contaminante, es importante aclararlo, es un material totalmente inocuo salvo la contaminación visual que se genera por la mala dispocisión. Es totalmente reciclable pero esto se ve perjudicado cuando se le agregan este tipo de aditivos".
Por su parte, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) hizo su advertencia al elaborar un informe en el que detalla que, si el "destino final para los residuos es el relleno sanitario, no hay prácticamente ventaja alguna en el uso de materiales biodegradables u oxodegradables", porque "no se degradarán en las condiciones allí imperantes".
Finalmente, desde el Concejo Deliberante local, la presidenta de la Comisión Asesora de Medio Ambiente Aloma Sartor adelantó que discutirán una ordenanza que de marcha atrás con la medida que "cambió para abrirle la puerta seguramente a un gran negocio que nosotros no podemos saber, pero no he visto jamás al OPDS poner en marcha con tanta celeridad y eficiencia como esta" y subrayó que "lo más escandaloso es que se lo ha difundido como si fuera un gran camino".
Sólo se permitirá el uso de bolsas de polietileno por cuestiones de asepsia, para contener alimentos o insumos húmedos elaborados o preelaborados. La medida tiene como objetivo evitar el impacto ambiental que significa el enterramiento de bolsas de plástico.
Sin embargo, la investigadora de la Planta Piloto de Ingeniería Química de nuestra ciudad, Silvia Barbosa, aseguró que estas "bolsas oxodegradables no son biodegradables. Eso está probado por organismos internacionales".
"Lo que se denomina oxodegrable es un material que tiene un 98% de polietileno, el mismo que se usaba antes, y a lo sumo un 2% -generalmente es un 1%- de un catalizador que es una sustancia que divide en el tiempo en pedacitos más pequeñitos a la bolsa de polietileno. Es decir, no se va a ver una bolsa grande volando sino pedacitos, pero no hay bacterias que puedan alimentarse de este tipo de materiales porque sigue siendo polietileno"", aseguró.
Además aclaró que "el polietileno no es contaminante, es importante aclararlo, es un material totalmente inocuo salvo la contaminación visual que se genera por la mala dispocisión. Es totalmente reciclable pero esto se ve perjudicado cuando se le agregan este tipo de aditivos".Por su parte, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) hizo su advertencia al elaborar un informe en el que detalla que, si el "destino final para los residuos es el relleno sanitario, no hay prácticamente ventaja alguna en el uso de materiales biodegradables u oxodegradables", porque "no se degradarán en las condiciones allí imperantes".
Finalmente, desde el Concejo Deliberante local, la presidenta de la Comisión Asesora de Medio Ambiente Aloma Sartor adelantó que discutirán una ordenanza que de marcha atrás con la medida que "cambió para abrirle la puerta seguramente a un gran negocio que nosotros no podemos saber, pero no he visto jamás al OPDS poner en marcha con tanta celeridad y eficiencia como esta" y subrayó que "lo más escandaloso es que se lo ha difundido como si fuera un gran camino".
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